5.3 Multimedia e internet: arte digital, videojuegos.
Los deportes electrónicos están a la orden del día, League of Legends o Counter Strike son dos de los videojuegos más grandes con competiciones a nivel profesional, con los FIFA la propia liga de fútbol española ha creado una competición paralela llamada eLaLiga. Estos juegos y muchos más con competiciones profesionales tienen una audiencia que continúa creciendo año tras año, pero una de las cosas más impresionantes de los deportes electrónicos está en el sim-racing¸ los simuladores de conducción. La diferencia entre estos y los otros deportes electrónicos es que si las físicas del juego son correctas las habilidades del jugador se pueden trasladar al mundo real, conducir con un volante delante de una pantalla puede ayudarte mucho a aprender a trazar curvas o a controlar el coche en ciertas situaciones, en cambio por jugar mucho al Valorant no vas a saber usar armas.
Los periféricos usados en este tipo de competiciones pueden ser desde un simple volante con una pantalla hasta simuladores con tres pantallas, volantes con una fuerza increíble o incluso asientos que emulan los movimientos que sufre el coche en el mismísimo videojuego, pero el factor esencial al final de cada carrera es la calidad de cada uno de los jugadores en circuito.
Con los simuladores de conducción existe mucha competición a nivel online, el juego iRacing es uno de los mayores exponentes, cada jugador tiene su propia puntuación llamada iRating que los clasifica por su nivel, creando un nivel en cada carrera muy igualado, además el juego tiene copas con competiciones como la NASCAR, Porche o de rallycross. En otros juegos como Dirt Rally o Gran Turismo ya ha habido campeonatos mundiales presenciales y de hecho, gracias a este último, surgió el caso de Lucas Ordoñez, que gracias al juego compitió a nivel profesional con coches reales, actualmente existe la GT Academy que intenta convertir a los mejores jugadores de Gran Turismo en pilotos reales.
Hace unas semanas, la Federación Internacional del Automóvil comenzó una nueva aventura dentro del sim-racing con el juego WRC 9, un simulador de rallye, los mejores se clasificarán para competir con coches reales a través de diferentes pruebas en todo el mundo para acabar compitiendo entre ellos con coches reales y que los ganadores tengan la oportunidad de correr una temporada en el mundial de rally con un Ford Fiesta R5, un coche con unos 300 caballos de potencia, además de unas becas para participar en el Junior WRC, de hecho el ganador de la prueba RallyAtHome ha sido Alejandro Aroca, más conocido como “Billy Cherokee”, un jugador competitivo que gracias a su carácter está despegando como creador de contenido con más de 100.000 subscriptores y que competirá en las finales contra los demás clasificados con un crosskart* Todo el mundo que tenga el juego y una expansión tiene la oportunidad de correr y competir para lograr el sueño de muchas personas, el único requisito es tener entre 17 y 26 años.
Alejandro Aroca, ganador del primer reto del WRC9 *KartCross
Los videojuegos que forman parte de los deportes electrónicos requieren mucha dedicación, horas de prácticas y un desgaste mental alarmante para cada uno de los jugadores, por eso los equipos profesionales contratan psicólogos y preparadores físicos para que los jugadores rindan al máximo y mantengan su mentalidad, en el caso del evento organizado por la FIA no es para menos, cada jugador que logre superar las pruebas necesitará una preparación física mínima para resistir el desgaste de competir en coches reales, hay participantes que ya son corredores de diferentes disciplinas pero compiten contra otros que nunca se han subido en un coche de carreras y el nivel sigue siendo muy similar.
Conforme vaya evolucionando la tecnología y las físicas sigan perfeccionándose, los videojuegos serán cada vez más realistas, aunque actualmente muchos de los pilotos que compiten pero no tienen grandes patrocinadores entrenan en sus propias casas, con el paso del tiempo seguirán saliendo oportunidades únicas como las actuales con la FIA y WRC 9 o la GT Academy, los videojuegos se están convirtiendo en una de las vías más viables para que la gente logre convertirse en piloto ya que el mundo del motor es un deporte muy exigente, sobretodo a nivel económico.