4.3. El documental. Tipos de documentales. El documental como documento cultural
“Lo único que te pido es que no empieces el documental con una escena de la banda a punto de salir al escenario, que ya está muy visto”. Justo así es como da comienzo el documental de Prime Video de Coldplay llamado A Head Full Of Dreams. Se estrenó el 14 de noviembre de 2018 y fue dirigido por Mat Whitecross, el autor de conocidos videoclips como Sky Full of Stars o Paradise. En 1996 conoció a Guy Berryman (bajista), Jon Buckland (guitarra), Will Champion (batería) y Chris Martin (cantante). Un año después los cuatro miembros se unieron y formaron Coldplay. Desde entonces les ha estado filmando.
En sus 104 minutos se recopilan imágenes rodadas durante los conciertos y grabaciones de diferentes giras por el mundo, desde sus inicios hasta la gira del último disco que grabaron antes de hacer el documental: A Head Full Of Dreams (2016-2017). Además, también podemos observar imágenes inéditas grabadas por los propios miembros de la banda dignas de pararse a observar. El documental recoge imágenes desde sus inicios hasta su presente.
Llevaban casi un año de amigos cuando comenzaron a tocar juntos. Su historia tiene lugar en el año 1996 en la residencia de estudiantes de la University College of London, donde Chris Martin y Jon Buckland se hicieron amigos inseparables. Durante su estancia allí trataron de formar un grupo. Al cabo de un tiempo, junto a otros estudiantes de la universidad crearon Pectoralz. Más tarde se unió un compañero de clase llamado Guy Berryman. Un año más tarde la banda cambió de nombre a Starfish. Will Champion se uniría más tarde como batería, completando así la formación original de Coldplay.
Todos los fans de Coldplay nos hemos preguntado alguna vez: ¿De dónde viene el nombre del grupo? Guy, el bajista de la banda, contesta a esa pregunta: “Un amigo tenía una banda llamada Coldplay. Decidieron que no les gustaba el nombre, así que se lo robamos. Resulta que era una palabra difícil de pronunciar”.
Phil Harvey fue el primer representante de la banda que dejó la universidad para poder dedicarse a ella. El manager pagó su primer disco. Chris y Phil se conocieron en el colegio y desde entonces han sido mejores amigos.
El primer concierto fue en enero de 1998. Iniciaron su carrera musical tocando en antros de Candem, bajo el nombre de Starfish – Will aún no se había unido a la banda, por lo que no tenían batería –. En el segundo concierto tocaron por primera vez bajo el nombre de Coldplay. En el año 2000, se trasladaron hasta el número 268 de Camdem Road. Fue ahí donde comenzaron a ensayar y tocar, en el antiguo piso de Chris y Jon.
Tras duros comienzos, comentan que lo que les hizo seguir en el grupo era que las canciones cada vez eran mejores. Además, Chris apostaba mucho por la banda; así lo definen los otros tres miembros: “Es la fuerza creativa y un genio musical que no deja de convencernos. Tiene una energía contagiosa por la música. Chris siempre tiene una idea muy clara de lo que quiere hacer y de donde quiere estar”. A raíz de uno de esos conciertos con los que iban creciendo cada vez más, Steve Lamacq les llevó a la BBC Radio 1 para promocionarles, considerándoles un “grupo sin sello”.
Tras el concierto de la BBC, la New Musical Express (NME) escribió un artículo titulado 20 bandas para escuchar en el 99; el nombre de Coldplay aparecía junto a otros grupos como Muse o Bellatrix. A raíz de ahí, las salas de conciertos empezaron a llenarse. Productores musicales que les habían cerrado la puerta decidieron ponerse en contacto con ellos tras ver el éxito que estaban alcanzando: “He recuperado vuestra maqueta. Es increíble”. Siguieron con sus conciertos y firmaron en Trafalgar Square. Fue ahí cuando se plantearon que eso acababa de empezar y que debían trabajar duro. Así llegó la primera gira por Reino Unido mediante un autobús.
“Hicimos Parachutes en un momento en el que no sabíamos controlar ni identificar. La madre de Will estaba muy enferma y no sabíamos como ayudarlo”. Fue una época complicada, ya que como explican, la confianza entre los miembros estaba disminuyendo. Después de muchas discusiones y enfados, el álbum de Parachutes se lanzó en julio de 2000 – dos meses después de la madre de Will -. Como gesto de cariño al batería de la banda, le dedicaron el álbum a su madre, Sara Champion.
Aparecieron por primera vez en televisión con su single Yellow. Fue así como llegaron a vender más de tres millones de copias de su álbum, a llenar estadios, a emocionar a la gente y a convertir a Parachutes en el disco de platino con miles de billones de ventas de todos los tiempos.
En cambio, llegó un momento en el que Will, el batería, dejó de formar parte de la banda. El productor era muy perfeccionista y achacó la culpa a Will, ya que “no tenía suficientes conocimientos de batería para las nuevas canciones que se iban a presentar”. Los demás le creyeron y coincidieron. “La situación fue muy tensa. Sabíamos que lo que habíamos hecho no estaba bien. Tras grabar algunas audiciones le pedimos que volviera. Y por suerte, volvió. Si hubiéramos cogido otro camino, estoy seguro de que hubiéramos fracasado”, explica el bajista, arrepentido. “Will es la base de una estatua. Sin él, se desploma. Aunque lo cierto es que sin ninguno de los otros tres esto no seguiría adelante” señala Chris.
En 2002 lanzaron el segundo álbum denominado A Rush of Blood to the Head. Los productores y miembros de la banda destacan la pasión que puso Chris con el segundo disco. Una de las canciones más famosas e íntimas del álbum, The Scientist, la compuso Chris en un fin de semana. “El lunes cuando llegamos al estudio, grabamos la canción tal y como estaba, y conservamos la versión original”, señala Jon.
Decidieron dar un paso más y abrirse paso al mercado norteamericano. Dave Holmes tomó las riendas y se convirtió en su manager en EEUU. “Al principio nos costó mucho hacernos un hueco, ya que no era la típica música norteamericana que esperaban escuchar, pero lo conseguimos” explica Will.
Cuando empezaron a grabar A Head Full Of Dreams Guy, Will y Jon estaban trabajando en una canción, pero no les convencía. Por ello, Jon viajó hasta donde estaba Chris, y juntos compusieron Adventure Of A Lifetime, que, por mayoría, se convirtió en el single del álbum.
La gira de A Head Full Of Dreams duró año y medio en los años 2016 y 2017. “Queríamos hacer un álbum con el que siempre hemos soñado”. Era el momento de hacer un álbum sobre la esperanza, la unión, el amor. El momento de aunar todos los sonidos que amamos y los estilos que nos gustan”. El propósito del álbum, como explican, es aceptar a todo el mundo, incluso a quienes no les gusta la idea que siguen. “Les propusimos a todos los que estaban con nosotros si querían cantar, porque de eso te trataba, de acoger y recoger las voces de gente tan estupenda incluyendo a nuestros hijos”, apunta el cantante. El álbum trata sobre los sueños que se hacen realidad, y para la banda, contar con colaboraciones como Noel Gallagher lo fue. Como curiosidad, cuando hicieron la colaboración con Beyoncé para su canción Hymn for the Weekend, tuvieron que grabar en la habitación del hijo de Chris. “Tenía que parecer que eso era un estudio profesional”.
En el documental aparecen imágenes del momento en el que la banda elige qué canciones deben estar en el álbum. Amazing day, Hymn for the weekend o Up and up son canciones de las que se hablan y discuten para incluirlas o no. En los vídeos del estudio se refleja muy bien “el buen rollo” y la complicidad que tienen entre ellos incluso cuando tienen que debatir acerca de sus preferencias.
“Cuando pienso en nuestro primer álbum Parachutes es muy acústico, pequeño e íntimo. Sin embargo, si rebobinas a A head full of dreams, es totalmente diferente”, señala Guy. “No intentábamos repetir ninguna receta. Parábamos hasta que nos saliera perfecto. Quien diga que no hay una parte negativa en lo que hacemos, miente.” El grupo ha demostrado lo que es capaz de hacer, ya que ellos mismos definen su producción y sus canciones como “caseras y honestas”.
Phil, el manager, se cansó de la banda y la abandonó. “Tras su marcha, tomamos malas decisiones y no funcionábamos bien en esa época. Estábamos un poco perdidos. El proceso de grabación del disco X&Y fue el que menos disfrutamos. La canción de Fix You fue la que nos salvó”, declara Guy.
Tras la vuelta de Phil – ya no como manager, sino como componente de Coldplay – volvieron a recuperar la ilusión con el álbum Viva La Vida. Brian Eno se convirtió en el productor que buscaban: aquel que experimentaba y daba ideas sin importar el fracaso. Con él, para aprender más acerca de canto viajaron hasta Barcelona. Gracias a ese viaje, Viva la Vida se caracterizó principalmente por la armonía de todas las voces que la forman.
Durante la gira del disco Mylo Xyloto (2011), el artista cuenta que muchos cantantes como él se sumergen en una burbuja, y eso hace que te apartes de tu vida personal, y de esa manera, se incrementen tus problemas. Tras el final del tour más la ruptura de Chris con su pareja – lo que supuso una época en la que el cantante define como horrible – comenzaron a trabajar con el nuevo álbum Ghost Stories que se lanzó en 2014. En 2013 se sumergieron en el estudio de Guy para grabar y componer. “Supuso una época sanatoria para Chris. Lo estaba pasando realmente mal” apunta Jon. Para el bajista fue un álbum muy personal, valiente y sincero. “Queríamos darle el consuelo que siempre le había dado la música. Solo podíamos ayudarle, siendo sus amigos musicales”.
El final del documental recoge la frase de una de sus canciones que su álbum A Head Full Of Dreams tiene como bandera: “Never give up” acompañada del último concierto de la gira. Sin duda, Coldplay se caracteriza por su amistad, por la pasión que le ponen a todo lo que hacen y por la honestidad. Como bien dice Chris Martin: “El sueño inicial pensábamos que sería el punto y final, pero nos hemos dado cuenta de que esto es solo el principio”.