4.2. Emergencia y evolución de la tecnología video. La posproducción en la imagen videográfica
¿Qué sería del Universo Cinematográfico de Marvel sin sus extensas etapas de postproducción donde se añaden los componentes más esenciales de sus historias? Los efectos visuales en el cine han evolucionado en las últimas décadas hasta el punto de llegar a ser una parte imprescindible de algunas producciones. A nivel visual, la gran lista de películas que componen el Universo de Marvel son todo un espectáculo. Era de esperar, entonces, que la primera serie original de Marvel Studios en streaming para Disney Plus recuerde a esas películas hechas para ser llevadas a la gran pantalla.
Wandavision –Bruja Escarlata y Visión en España- llegó a la plataforma streaming de Disney el 15 de enero de este año, convirtiéndose en la primera serie de la fase cuatro del Universo Cinematográfico de Marvel. Esta miniserie de nueve capítulos ha sido creada por la directora de cine Jac Shaeffer y nos cuenta más a fondo la historia de Wanda Maximoff y Visión después de lo ocurrido en Vengadores: Endgame.
Wandavision es todo un homenaje a las sitcoms americanas desde los años 50 y, según pasan los capítulos, nos muestra cómo ha ido evolucionando la televisión. De hecho, en el documental recientemente estrenado Marvel Studios: Assambled: The Making of WandaVision nos cuentan que los primeros capítulos fueron grabados con público real en el set de rodaje, tal y como se hacía en los inicios de la televisión. Aunque trabajaron con efectos especiales en directo, esto no significa que la postproducción haya quedado al margen en estos capítulos ya que fue esencial para acabar de darle ese toque que tanto caracteriza a las producciones de Marvel.
Para el rodaje de estos primeros capítulos, el equipo de coloristas estudió qué color sería el ideal para el maquillaje de Paul Bettany -Visión en la serie- y, tras varias pruebas de cámara, llegaron a la conclusión de que Visión debía dejar a un lado su característico granate e intercambiarlo por el azul ya que el acabado para la grabación en blanco y negro era mucho mejor. Sin embargo, en las escenas de color de los siguientes capítulos Bettany continúa maquillado de color púrpura.
Durante la fase de postproducción, el equipo se encargó de acabar de digitalizar su rostro para la mayoría de las escenas. En otras tomas, el actor lleva una máscara sumada al maquillaje, pero durante toda la serie, cuando el personaje toma forma de androide el acabado de su rostro está generado por un ordenador. Aunque recortan digitalmente las orejas del actor para lograr ese acabado, lo primordial siempre es mantener la esencia de su actuación.
Desde luego, los siguientes capítulos explican la enorme cantidad de dinero que Marvel ha invertido en este proyecto. El presupuesto estimado de cada uno de los nueves capítulos que componen la serie es de 25 millones de dólares, convirtiéndola así en una de las series más caras de la historia de la televisión.
Son incontables las escenas que toman un significado distinto durante la postproducción. Ejemplo de ello son todas las secuencias relacionadas con la magia. La transformación de Wanda en Bruja Escarlata es uno de los momentos más esperados y espectaculares de toda la serie y por eso es bastante impactante ver a Elizabeth Olsen con un fondo verde durante el rodaje, sin el color de sus ojos y el aura roja de la magia de su personaje.
Relacionado con la postproducción de la magia de Wanda y la de otros personajes como la principal antagonista de la serie, Agatha Harkness, interpretada por la actriz Kathryn Hann, se encuentra el hechizo principal de la serie. Una barrera protectora creada por Wanda que separa su realidad en Westview de la del resto del mundo, secuestrando en cierto modo a cientos de personas en ese lugar.
Jen Underdahl y Tara Demarco, encargadas de los efectos visuales de la serie, explican en el documental comentado anteriormente que esa barrera debía seguir la estética del homenaje a la televisión. Para ello, estudiaron el funcionamiento de los imanes de las televisiones antiguas de tubo y esa magnetización que se conseguía a través de la pantalla. También observaron la pixelización que sucedía al hacer zoom en una de esas televisiones antiguas. De esta forma y con la ayuda de efectos visuales adaptaron en ese campo de fuerza protector el lenguaje de la televisión.
Otro de los aspectos más modificados durante la postproducción de Wandavision son las secuencias de vuelo. Los actores las rodaban con la utilización de arneses que más tarde fueron borrados en la digitalización. Esta miniserie fue todo un reto para Marvel Studios ya que nunca había tenido que adaptarse a tantas secuencias de vuelo en una sola producción y además tuvieron que enfrentarse a una escena de lucha rodada por completo en el aire.
Claro está que la supervelocidad no existe en nuestro mundo y esa es otra de las cosas que se suman a la postproducción de Bruja Escarlata y Visión. Aunque probablemente lo que más me ha llamado la atención es que hay escenarios que parecen totalmente reales y que, en realidad, están generados con CGI (Computed Generated Imagery). Por ejemplo, cuando Wanda expande esa barrera protectora y la base militar pasa a ser parte de Westview en forma de circo, ese circo está creado totalmente con CGI.
En definitiva, un sinfín de efectos visuales son los que han dado lugar al acabado final de Wandavision. Estos han ayudado a Marvel Studios a recrear a la perfección todo lo que sucedía en la mente de Wanda hasta el punto de hacer dudar a sus espectadores sobre qué es real o no. La utilización de imágenes generadas por ordenador, el uso del chroma key y el empleo de arneses para poder volar, entre otros, nos hacen reflexionar también sobre la importancia de la calidad de la actuación de sus actores, sobre todo la de Elizabeth Olsen. Desde luego, sin la postproducción, esta miniserie no habría logrado ser todo un éxito ni convertirse en la mejor serie de Marvel hasta la fecha.